Alertados por rumores muy extendidos en el país sobre la existencia de españoles privilegiados que, pese a la crisis, siguen comiendo la sopa boba, nos hemos puesto a la tarea de comprobar su veracidad. Aquí está el impresionante documento que lo confirma: ésta es la sopa boba.
A unos pocos los ponía yo a comer la sopa boba durante unos cuantos meses para que supieran lo que son necesidades.
ResponderEliminarHay que poner en las listas del Inem a la mayoría de los políticos.
Un abrazo
Esta sopa es la que comía Andy Wharhol. Demasiado buena. Yo los ponía a pan y agua. ¡Ah! Luis, y en la cola del Inem al sol y sin gorra.
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