Incapaz de turbar la paz en las deliberaciones del XXXI
Concurso Nacional Sarthou Carreres, heme aquí dando la espalda a los miembros del
jurado y asistentes para tomar una imagen auto-retratándome en mi descanso. En
la foto, no se ve con claridad rostro ninguno, ni nada que se asemeje a un
fallo fotográfico. Más bien parece una partida de poker donde muchos quieren
meter baza. Me da la impresión de que, cada día que pasa, necesito más del
`lapicero´ para hacerme entender con mis imágenes. ¿Será que estoy empezando a
andar por la línea correcta, a los sesenta?
Concurso Nacional Sarthou Carreres, heme aquí dando la espalda a los miembros del
jurado y asistentes para tomar una imagen auto-retratándome en mi descanso. En
la foto, no se ve con claridad rostro ninguno, ni nada que se asemeje a un
fallo fotográfico. Más bien parece una partida de poker donde muchos quieren
meter baza. Me da la impresión de que, cada día que pasa, necesito más del
`lapicero´ para hacerme entender con mis imágenes. ¿Será que estoy empezando a
andar por la línea correcta, a los sesenta?
Te haces entender perfectamente, Pepe. A lo mejor será por el lapicero, o por los sesenta, o porque es una foto cojonuda. La fotografía dentro de la fotografia. Si llego a saber que el espejo seguía ahí, me dejo caer por el fallo.
ResponderEliminarDichoso lapicero Pepe. Como dice Fernando, te haces entender perfectamente. Me encanta tu foto
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