Pepe, tranquilamente aposentado después de una mañana de arrastrar nuestras ya bastante deterioradas anatomías a lo largo y a lo ancho de la provincia, siguiendo el cauce de la Acequia Mayor de Vila-real, se pregunta a sí mismo si una Cruz Campo bien fría es suficiente recompensa para tan homérica hazaña. Llamo vuestra atención, queridos lectores, hacia el bolsillo de la camisa: ¿será ese el "lapicero" al que atribuye cualidades mágicas para la comprensión de sus fotografías? Misterio sin resolver.martes, 14 de junio de 2011
El cuarto carroza
Pepe, tranquilamente aposentado después de una mañana de arrastrar nuestras ya bastante deterioradas anatomías a lo largo y a lo ancho de la provincia, siguiendo el cauce de la Acequia Mayor de Vila-real, se pregunta a sí mismo si una Cruz Campo bien fría es suficiente recompensa para tan homérica hazaña. Llamo vuestra atención, queridos lectores, hacia el bolsillo de la camisa: ¿será ese el "lapicero" al que atribuye cualidades mágicas para la comprensión de sus fotografías? Misterio sin resolver.
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Yo `el lapicero´ lo uso, si con él me hago entender es otra cuestión. Y la verdad, una cerveza no es pago suficiente para excursión de tanta envergadura; pero, como problemas sencillos piden soluciones sencillas, en casa me esperaban dos más de la misma marca, reserva, de las que tomé buena cuenta durante la comida. Y eso que en ese menester, soy de vinos. Pero era otro día.
ResponderEliminarUn saludo.