Me he permitido subir el edificio entero del que forma parte la foto del carroza Fernándo, de esa manera creo que puede comprenderse mejor la gran clase del edificio que formó parte del complejo de una gran siderurgia
Buena idea contrastar la imagen completa de la nave con el detalle de la ventana, por lo que implica de ilustrar dos formas diferentes de afrontar el hecho fotográfico. En tu caso, la foto se situa entre el arte conceptual y el “land art”, con lo que le das una visión documental a la fotografía. En la foto de la ventana, pretendo abstraerla del entorno, de forma que la representación icónica transcienda la propia realidad, la imagen se convierte en algo distinto de la cosa fotografiada.
Coincido plenamente contigo Fernando pero además quiero añadir que el autor ha plasmado la soledad y la nostalgia de la reconversión industrial de los años 80 que tanto afectó a la comarca del Camp de Morvedre y en especial al Puerto de Sagunto. En cuanto a la técnica, el autor transgrede, por que él lo vale, la regla de los tercios si miramos al horizonte, pero ¡cáspita! la mantiene si seguimos el límite del tejado...genial. Y el descampado mostrado en primer plano recuerda que de él se marcharon las ilusiones laborales y siderúrgicas de una comarca valenciana.
Efectivamente, Juan, me había dejado en el tintero esa vertiente de fotografía social y de denuncia que el Carroza Primero ha sabido imprimir a la foto. Como, por otra parte, no podía ser de otra forma, dado que su trabajo en Laminaciones de Lesaca le llevó a comprender en profundidad la problmática de la reconversión de la indistroa siderurgica.
Buena idea contrastar la imagen completa de la nave con el detalle de la ventana, por lo que implica de ilustrar dos formas diferentes de afrontar el hecho fotográfico. En tu caso, la foto se situa entre el arte conceptual y el “land art”, con lo que le das una visión documental a la fotografía. En la foto de la ventana, pretendo abstraerla del entorno, de forma que la representación icónica transcienda la propia realidad, la imagen se convierte en algo distinto de la cosa fotografiada.
ResponderEliminarCoincido plenamente contigo Fernando pero además quiero añadir que el autor ha plasmado la soledad y la nostalgia de la reconversión industrial de los años 80 que tanto afectó a la comarca del Camp de Morvedre y en especial al Puerto de Sagunto. En cuanto a la técnica, el autor transgrede, por que él lo vale, la regla de los tercios si miramos al horizonte, pero ¡cáspita! la mantiene si seguimos el límite del tejado...genial. Y el descampado mostrado en primer plano recuerda que de él se marcharon las ilusiones laborales y siderúrgicas de una comarca valenciana.
ResponderEliminarEfectivamente, Juan, me había dejado en el tintero esa vertiente de fotografía social y de denuncia que el Carroza Primero ha sabido imprimir a la foto. Como, por otra parte, no podía ser de otra forma, dado que su trabajo en Laminaciones de Lesaca le llevó a comprender en profundidad la problmática de la reconversión de la indistroa siderurgica.
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